Por Benjamín Martínez Pérez (*)

En las sociedades modernas existen muchas fuentes de ruidos considerados molestos que pueden afectar nuestra salud. Afortunadamente, también se han desarrollado tecnologías para controlarlos y mitigar sus efectos.

El sonido es una sensación producida en el oído por vibraciones ondulatorias que se propagan en forma de ondas y hacen vibrar el tímpano y sus componentes transformándolos en impulsos eléctricos que llegan al cerebro y este se encarga de decodificar el sonido. Lo que escuchamos es el conjunto de múltiples y repetidas vibraciones producidas por uno o varios objetos.

Por otra parte, el ruido, es una impresión subjetiva que produce un sonido en las  personas, el cual puede llegar a ser molesto o perjudicial, llegando a interferir en una actividad o persona e incluso puede llegar a ocasionar la pérdida progresiva de la audición.

La gran diferencia entre el sonido y el ruido, es que el primero puede ser agradable, en tanto que el segundo es contaminante, molesto y dañino para la salud.

Se han provocado daños auditivos al ser humano, debido a la exposición cotidiana a fuentes sonoras que rebasan el límite de resistencia del oído, es común observar personas en la vía pública, en obras de construcción, fábricas, etc. expuestos a niveles de ruido de mediana y alta intensidad, los cuales provocan daños auditivos progresivos y degenerativos.

Entre los efectos en la salud destacan: el desplazamiento temporal y permanente del umbral de audición, daños en la memoria, concentración, estrés, irritabilidad, cefaleas, fatiga, taquicardias, hipertensión, disminución de la capacidad sexual, problemas de sueño y molestias digestivas. Las consecuencias del ruido sobre la salud se manifiestan años después de la exposición.

Las innovaciones tecnológicas para proteger el oído del ruido se dividen en 2 sistemas, pasivos y activos.

Los Sistemas pasivos, comprenden filtros acústicos y silenciadores que son barreras físicas estáticas. Dentro de las  innovaciones más recientes están los metales de alto amortiguamiento cuyo funcionamiento de basa en deformaciones internas y materiales estrictivos los cuales son compuestos metálicos muy delgados que tienen como principio la deformación en la estructura cristalina en presencia de campos magnéticos y eléctricos.

Por su parte los sistemas activos, comprenden tecnologías que consisten en un sistema eléctrico que genera fuerzas dinámicas que interfieren o eliminan las vibraciones no deseadas. Para tal fin se usa un micrófono, un procesador de audio y actuadores, y su uso principal es disminuir el sonido dentro de las habitaciones, cabinas de automóviles, aeronáutica e instrumentación de precisión.

Muchas son las innovaciones tecnológicas para combatir el ruido, sin embargo, aún estamos lejos de poder prevenir sus impactos ambientales negativos en la sociedad y el medio ambiente.

 

(*) Ingeniero Industrial, dreem1423@gmail.com