Ante los lamentables hechos ocurridos en la Refinería de Amuay de Petróleos de Venezuela, VITALIS manifesta sus sentidas palabras de condolencia a los familiares de las víctimas y extiende sus sinceros deseos porque los heridos logren su pronta y plena recuperación.
De igual forma, VITALIS insta a las autoridades a investigar en forma eficiente y eficaz los hechos ocurridos, a fin de establecer las responsabilidades del caso, así como a tomar todas las medidas necesarias para atender la emergencia y evitar que situaciones como éstas vuelvan a ocurrir.
En espera de los resultados de las primeras evaluaciones, VITALIS hace un llamado a evitar las especulaciones en torno a las implicaciones ambientales de este penoso hecho. Sin embargo, hace un llamado a las autoridades a cumplir a cabalidad lo establecido en los planes de contingencia en la materia, a fin de atender con prontitud esta situación, así como a vigilar con celo el cumplimiento de los planes y programas de Higiene, Seguridad y Ambiente (SHA) dentro de la industria petrolera y petroquímica.
Expertos de VITALIS aseguran que pasará algún tiempo para comprobar los daños ocurridos, y los impactos ambientales negativos dependerán especialmente del tipo de combustibles incinerados y los gases emitidos. Aspectos como la velocidad y dirección del viento y la composición de los contaminantes, serán fundamentales para estimar el efecto de las partículas y gases emitidos dentro del área de influencia, tanto sobre el medio terrestre como el acuático, además de aquellos sobre las poblaciones humanas, que pudieran sufrir afecciones respiratorias, y que pudieran requerir asistencia médica especializada.
En este proceso, una vez cese el incendio, debe realizarse una auditoría ambiental minuciosa, que recomendamos sea desarrollada por expertos independientes, que complemente las investigaciones de la estatal petrolera, para documentar científica y técnicamente todos los daños, y estimar las medidas que deberán implementarse para mitigarlos, así como para revertir los impactos ambientales negativos, a fin de evitar efectos indeseables sobre las comunidades humanas, la flora y la fauna, el medio físico, y los procesos ecológicos esenciales y fenómenos evolutivos asociados.
Tal y como ha sugerido nuestro asesor el Dr. Juan Carlos Sánchez, habrá que tener cuidado en la deposición de las partículas emitidas, porque aparte de ocasionar problemas respiratorios y cardiopatías en las personas, altera los ciclos químicos y de nutrientes en los suelos y aguas superficiales. Asimismo, hay que estar atentos a la diseminación de los hidrocarburos aromáticos policíclico (PAH), tanto en el suelo como en los cuerpos de agua, debido a que estos pueden ocasionar alteraciones genéticas, bioquímicas o fisiológicas en diversas especies, que pueden poner en riesgo su supervivencia y eficacia biológica en las áreas expuestas.
Desde el punto de vista jurídico y técnico, VITALS señala que se tendrá que evaluar si hubo negligencia, imprudencia o impericia de quienes tienen a su cargo y control a a Refinería de Amuay para determinar que fue lo que allí sucedió, y establecer las medidas ejemplarizantes para que ello nunca más vuelva a ocurrir.